lunes, 3 de agosto de 2009

Patricia Medina


Para los que no me conocen mi nombre es Patricia Medina y me invitaron para contar como ha sido mi vida a través de las enseñanzas de Seicho-no-ie.
Nosotros con Freddy nos conocimos más o menos a los 8 años cuando vivíamos en Brasil. Paralelamente mi mamá, en esa misma época conoció Seicho-no-Ie en Brasil.
Mi mamá viene de una familia donde sus papás fueron separados antes de que juntaran.
Mi papá también viene de una familia donde sus papás se separaron y después mi papá tuvo otra mamá.
Por su parte los papás de Freddy, se separaron, se vinieron de a chile en el 89 y nosotros con mi familia en el 90.
Bajo esos antecedentes podríamos decir que el Karma era bastante fuerte!
Nos reencontramos con Freddy cuando teníamos, como 15 años, nos volvimos a perder y nos reencontramos nuevamente cuando teníamos 18 años.
Al principio todo era un mar de rosas, pero después empezamos a tener muchos problemas entre nosotros, discusiones, yo no me entendía bien con su familia y por esa misma época tuve hartos problemas con mi papá, no nos entendíamos, somos muy parecidos y llegué a un punto en que dije: “No me entiendo con Freddy, tampoco con mi papá…tengo que hacer algo! Voy a empezar a leer estos libritos, total mi mamá los lee y dice que siente bien!”.En ese tiempo, yo tenía cero convicción y a pesar de eso, Freddy me preguntaba de que se trataba esto (Seicho-no-ie) y yo le explicaba lo poco que se sabía y él así se empezó a interesar…
Reconozco que todo toma el tiempo de acuerdo a la dedicación que uno le pone a las cosas que hace.Me tomó unos años reconciliarme con mi papá y en ese transcurso mi relación con él cambió 360º, así como mi relación con Freddy y su familia…al pto. que en el año 2001 decidimos casarnos y en el 2007 nació nuestro hermoso Vicente!!!
Y por esto sólo tengo motivos para agradecer en primer lugar a Dios, al Maestro ya mis padres por haberme mostrado este camino!
A lo largo de los años puedo decir que he visto a este joven, que es hoy mi marido, crecer y triunfar en lo profesional y material, a través del esfuerzo y la perseverancia, pero lo que nos ha hecho ser realmente felices como pareja y como familia, han sido sus logros espirituales.
Es por eso, que siento profundamente orgullosa y feliz del marido que tengo, y le dedico no sólo mi amor, sino que, mi profundo respeto y admiración por como él es.

No hay comentarios:

Publicar un comentario